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Crema suave de patatas con queso Asiago fresco, pan negro, cebollino y aceite de pimentón
Un abrazo cremoso que calienta el corazón y sorprende el paladar
Casa Finco
casari dal 1925
Un abrazo cremoso que calienta el corazón y sorprende el paladar
500 g de patatas peladas, cocidas y trituradas
100 ml de agua de cocción de las patatas
40 g de mantequilla
60 g de nata (crema de leche)
Queso Asiago fresco Monti Trentini
Sal fina
1 rebanada de pan de centeno
Aceite de oliva virgen extra
Pimentón
Cebollino
10 minutos
Facil
En un bol, verter el aceite, añadir el pimentón al gusto, mezclar y dejar infusionar.
Triturar con una batidora de mano en una olla caliente, o con un thermomix a unos 80 °C, las patatas añadiendo el líquido de cocción hasta obtener una crema homogénea, agregando sal al gusto.
Añadir la mantequilla derretida y la nata, y triturar un poco más.
Cortar el queso Asiago fresco en cubitos y reservar.
Calentar una sartén a fuego alto hasta que esté caliente.
Mientras tanto, cortar el pan de centeno en cubitos.
Agregar los cubitos de pan a la sartén y tostarlos durante 30 segundos, moviéndolos un par de veces.
Verter un poco de aceite de oliva virgen extra en la sartén, saltear los cubitos durante un minuto y reservar.
Picar finamente el cebollino al gusto.
Emplatado:
Verter la crema de patatas en un plato hondo.
Añadir los crostinis y el queso Asiago fresco.
Decorar con cebollino.
Explosión de sabor en cada bocado
¡Un plato de carácter único e inconfundible!
Un sabor envolvente, que calienta el corazón